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El reposo del guerrero

Gentileza Piñas del Sur.- Lucas Matthysse hace lo que le gusta hacer cada vez que tiene la oportunidad de regresar a su casa: se relaja, la pasa con amigos y la familia, cosas que su carrera profesional dentro del máximo nivel del boxeo mundial le permiten bastante poco últimamente.

El trelewense, que mantiene en vilo a los amantes del deporte de los puños cada vez que se sube a un ring, esperando que saque una mano que termine con cualquier rival, disfruta mucho su permanencia en el sur y en un mano a mano con Jornada habla de todo esto, su presente, su futuro y de la reciente pelea del pasado 14 de septiembre en Las Vegas con el estadounidense Danny García en la que cayó por puntos y debió resignar el cinturón interino WBC se los superligeros.

“Acá en Rawson, en la casa de mi mamá, que hace rato que no venía, descansando un poco, aprovechando ahora que puedo y disfrutando un poco”, fueron las primeras palabras del boxeador, que está radicado hace ocho años en Junín.

- ¿Qué hacés cada vez que venís?

- Me la paso en la casa de Walter, de Soledad (sus hermanos), o acá (en lo de su mamá Doris). Anteayer estuvimos en el cumpleaños de Omar (Narváez), voy a la playa, trato de descansar.

- ¿Tomaste conciencia estando en la zona de lo pendiente que está la gente de vos, de tus peleas?

- Sí. Todos estaban pendientes de mi pelea. Acá igual. Hace un rato cuando fuimos a comprar a un supermercado la gente ya me conoce y me dicen que estuvieron todos apoyándome, que ese día fue asado y boxeo y me pone muy contento que la gente me esté mirando, le guste lo que estoy haciendo. De a poco fue creciendo todo esto. Hace dos o tres años que vengo peleando bien en Estados Unidos y la gente de a poquito me empezó a seguir, esto cada vez se hizo más grande, pude llegar hasta el primer nivel, estar en una velada grande como en la que estuve y el apoyo que me dio la gente de acá, de todos lados a través de mi facebook fue muy grande y está bueno darse cuenta hasta dónde uno llega.- ¿Qué te pide la gente cuando te ve?

- Una foto, ahora que casi todos los celulares tienen para sacar fotos, algunos autógrafos. Yo ando normal y la gente pide fotos y está todo bien, no soy mala onda (sonríe).

- ¿Este presente lo soñaste alguna vez?

- Cuando era chico soñaba ser campeón del mundo, nada más. Después todo esto no. De pelear en una velada como en la que estuve o que toda la gente me conozca, la verdad que eso no lo esperaba, no lo busqué nunca y no lo soñé.

- ¿Cómo fue la noche de la pelea con Danny García?

- Salió todo bien, nada más que el ojo me complicó bastante pero creo que hice una buena pelea. Estuve en un evento muy grande que no cualquiera llega a ese nivel. Para mí hice una buena pelea, lo único que me faltó un ojo. Para mí fue una mano, no la vi, si la hubiese visto le hubiese corrido la cara (se vuelve a reír). Pero creo que fue una mano y me cerró el ojo y se me complicó el tema de la distancia y para ver. La seguí manteniendo, hacía fuerza para ver y busqué la pelea siempre.

- Es difícil pelear con García y con un solo ojo más.

- Sí. Nadie se entrena para pelear con un solo ojo, son cosas que tenés que resolver ahí y no es nada fácil pero seguí peleando igual.

- ¿Te va a dar la revancha García?

- Ni idea. Está en el contrato, ahora hay que ver si se hace. Los dos trabajamos con la misma empresa así que ojalá que se haga pero todavía no se sabe nada.

- ¿Cómo estás de la cara? porque ahora se te ve intacto.

- A los dos días no tenía nada. Tengo una fisura (cerca del arco superficial derecho) pero estoy bien.

- ¿Ya tenés ganas de subirte de nuevo al ring o después de semejante pelea viene bien un largo descanso?

- Quiero descansar, más allá que tengo ganas de hacer mi trabajo, entrenar. Hace rato que vengo con muchas concentraciones, muchos entrenamientos que son re duros por eso ahora quiero descansar. Siempre me encierro dos o tres meses. Se ha visto que en cada pelea me preparo muy bien.

- Muchos pueden pensar que ahora tenés todo servido pero el sacrificio continúa siendo muy grande.

- Hace ocho años que estoy en Junín. Llegué sin nada y pasé un montón de cosas y sigo pasando pero que valen la pena. Si pasaron, pasaron por algo porque estoy en un buen lugar y me siento bien. Por ahí estoy lejos de la familia, que es lo que uno extraña un poco porque allá estoy solo pero todo tiene su recompensa. Muchos años de sacrificio y no tengo que arrepentirme de nada.

- ¿Y siempre te acordás del barrio, de las Mil Viviendas? Siempre que podés las nombrás.

- Yo estoy en la casa de Soledad, que está en las “Mil”. Siempre paro ahí. Hoy nos vamos a juntar con los amigos del barrio. Hablamos de boxeo, de las peleas por ahí les digo que dejen de hinchar las bolas pero tranquilos, me junto con mis amigos de mi infancia, con los que me crié.

- No pudiste estar en la pelea de tu hermana (Soledad) en Mendoza pero la viste. ¿Se la robaron?

- Se la re robaron. La miré en mi casa, era mi cumpleaños ese día. Hizo una buena pelea. Para mí y para todos había ganado. Fue una lástima que le roben así porque tienen que dejar de hacer los fallos localistas porque perjudican a otro pero va a tener una nueva oportunidad.

- ¿Tu próxima pelea va a ser en Estados Unidos?

- Seguro. Yo quiero pelear allá. Si me quieren hacer pelear acá, para lo que yo siento, es como que voy a bajar un par de escalones. Estoy para pelear todavía allá, ojalá que me llamen. Sé que va a salir una pelea importante.

- Además, por el sacrificio de todos estos años, le querrás sacar el jugo desde lo económico también porque no debe ser lo mismo que pelear acá.

- Me gustaría pelear acá pero estoy haciendo mis últimos años de mi carrera y quiero pelear allá. Acá está bueno, está la familia que puede ir a verme pero creo que estoy para asegurarme yo.

- ¿Te gusta el sobrenombre que te pusieron en Estados Unidos (The Machine, La Máquina)?

- Allá me dicen todos así pero yo soy Lucas. Está bueno si a ellos les gusta, son de poner sobrenombres y quedó.